Inicio Análisis político Alejandro López Munguía 2015, la lucha será entre el PRI y el anti priísmo yucateco

2015, la lucha será entre el PRI y el anti priísmo yucateco

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2015, una lucha entre el PRI vs el antipriísmo

 

 

I.- En el 2015, el PRI no va a enfrentarse precisamente al PAN, sino al antipriísmo que priva en Mérida. La votación histórica registra un promedio de 110 mil votos seguros del antipriísmo, que van directamente para el candidato del PAN en la Ciudad Capital de Yucatán. Ese es el punto. Quienes estén pensando en la pobre oferta política que representa el blanquiazul, están cayendo en el error. Las fortalezas del Revolucionario Institucional no están en el registro de la historia, sino en la capacidad de allegarse nuevos votos para alcanzar la victoria electoral y en su contra juega el activismo político electoral de quienes constituyen el antipriísmo (Coparmex, Frente Cívico Familiar, la ex biblia, etc).

 

II.- La duda empieza a asaltarme, cuando observo que el IEPAC ha quedado en manos, precisamente de ese antipriísmo yucateco. La estrategia del tricolor ha sufrido un revés, y ni siquiera ha empezado la contienda formalmente. La designación de la Sra. Rosas Moya como presidenta de dicho organismo que sustituyó al IPEPAC, es un duro golpe para el PRI. Y la pregunta es ¿qué pasó?, ¿el PRI dejó pasar la oportunidad porque se distrajo, o porque no hizo el cabildeo? o peor aún, ¿acaso fue un madruguete?. El INE asestó un duro golpe político al tricolor y fortaleció el antipriísmo recalcitrante.

 

III.- La historia parece repetirse, en los años 1993 y 2001 (ya lo habíamos dicho), la federación pasó por encima de la soberanía de los poderes legislativo y judicial en la entidad yucateca. Los resultados favorecieron a los candidatos del PAN, y en todas esas maniobras, estuvo presente la presión del antipriísmo. En 1993 obligaron al candidato del PRI, Orlando Paredes Lara a renunciar a su triunfo y en el 2001, la federación encabezada por Vicente Fox, forzó la integración de un consejo electoral estatal a modo. Triste historia que desembocó en la victoria electoral del PAN con Patricio Patrón Laviada a la cabeza.

 

IV.- El PRI tiene pues en la mira, una elección estatal y otra federal que serán reñidas, violentas en términos verbales y manifestaciones públicas a las que ya nos tiene acostumbrado el antipriísmo. Los votos en Mérida, proyectarán a los candidatos del PAN a ocupar casi la mitad de curules (25), incluso sin tener que ganar los 15 distritos electorales, peor aún, teniendo la “obligación” de ganar aunque sea solo dos distritos. Y es que la nueva ley electoral del estado amarró a los priístas y se convirtió en plataforma de lanzamiento para el antipriísmo.

 

V.- La política en Yucatán está encrispada. Los momentos son propicios para los dimes y diretes. NO hay candidatos aún pero la designación juega un papel importante. En el PAN están conscientes de que ganar Mérida y elevar su presencia en el Congreso del Estado, les abre el camino para disputar la gubernatura. Sienten que la negociación de Madero con la federación les alcanza para eso. Hace varios meses lo escribí y señalé que la victoria electoral del PRI pasaba por el IEPAC (cuando lo dije, aún estaba vigente el nombre del IPEPAC). Y que habría que cuidar el perfil de los consejeros estatales. Sin embargo, falló el cabildeo y los priístas perdieron el espacio, es decir, de impulsar a uno con formación, con conocimiento, con probada imparcialidad, con manejo de la ley y con oficio para sobre llevar los temas electorales con total respeto a los derechos civiles y electorales.

 

VI.- Ahora las cosas se complicaron. Los priístas entrarán a la contienda electoral con el pie herido. Sin embargo, el PRI mostró su músculo político el pasado día domingo 29 al reunir a miles (versiones hablan de cerca de 50 mil yucatecos), para acompañar al Gobernador Rolando Zapata Bello en su mensaje desde el balcón del palacio de gobierno estatal. La verdad estuvo impresionante, y el mandatario no desentonó. El PRI está hecho para las grandes batallas. Eso queda claro.

 

VII.- Un día después, el PRI celebró la sesión extraordinaria donde reunió a sus consejeros políticos estatales. Allí mostró también un poco de la fuerza política que posee. El PRI se prepara para ir unido a las elecciones del 2015. Y queda claro que sabe organizarse. El Partido posee una estructura seria que está operando en todos los rincones del estado. Se espera que pronto empiecen a verse los resultados de los esfuerzos políticos.

 

VII.- Mientras tanto el antipriísmo siente que ha logrado asestar un duro golpe al PRI. Y aunque es verdad es un golpe duro, no es definitorio. El PRI ganó la elección del 2007, tanto en Yucatán como en Mérida, teniendo el PAN el control del IPEPAC. O sea, el hecho de que Rosas Moya sea la presidenta del consejo del IEPAC, no significa que el PRI esté derrotado. Desde luego que no.

 

VIII.- La meta del PRI es alcanzar 15 curules y 95 alcaldías en el interior del estado. Así como 4 de 5 diputaciones federales. La meta no es irracional, se tiene como principal fortalece el trabajo del gobernador, que no es cosa menor. El PRI está en posición de refrendar su futuro político, ganando el presente.

 

IX.- La selección de los candidatos es fundamental para alcanzar el triunfo electoral. En esta ocasión serán los candidatos del gobernador los que irán con todo para buscar la mayoría en el congreso del estado. Y cuando señalo que serán los candidatos del gobernador, es que así será. Y en ese sentido, el PRI funciona de manera precisa. Los federales le corresponderán al presidente de México, por ser el primer priísta del país.

 

X.- Las cartas están sobre la mesa. El activismo político del antipriísmo está en movimiento. Los empresarios se mueven y presionan al gobierno del estado para fincar responsabilidades a los gobiernos estatal de Ivonne Ortega y en especial al municipal de Angélica Araujo. Aprietan con los datos que proporcionó Ulises Carrillo director del Isstey para inundar a los lectores de la ex biblia y propagar entre sus afines la teoría de la gran corrupción. El antipriísmo está tratando de botar de su puesto a la fiscal, y de paso darle una manchada al ejecutivo estatal. No son tontos, de eso no hay duda, solo son antipriístas.