Inicio Análisis político Alejandro López Munguía PAN en Mérida se declara listo para la “madrina” interna

PAN en Mérida se declara listo para la “madrina” interna

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Luego de que Raúl Paz Alonzo y Mauricio Vila rindieran pulso con sus informes de resultados, la militancia panista se apresta a elegir a uno de ellos como su candidato a la alcaldía de Mérida. Se dice que el pacto que hubo a principios de Julio se rompió y que hoy las lanzas están quebradas.

Raúl Paz señaló que en el PAN la militancia manda, dejando claro que buscará ganar la candidatura mediante una intensa elección interna.

Mauricio Vila, por su parte manifestó que los malos, son los de enfrente. Los invitó a soñar, cual lenguaje Ivonnista, para darle una oportunidad a Mérida. Más romántico, imposible.

Discursos diferentes, que de nada sirven para evitar la “madrina interna que viene”. Pues es sabido que en la promoción del vídeo con “Montana”, la mano de Renán Barrera “meció la cuna”. Y es la misma que mece las aspiraciones de Vila.

En un frente a frente, Paz le dice a Vila, “sabes que las encuestas me favorecen”. Vila revira “Renán está conmigo, y él manda”.

¿Cuánto querrán los militantes del PAN a Renán para obedecer su señal?. Buena pregunta cuya respuesta da en el blanco preciso, al recordar cómo el alcalde de Mérida se ha alejado de la militancia, al grado de despreciarla y maltratarla.

Mérida es una Ciudad de mediano mundo. Donde sus calles, sus luminarias, sus mercados públicos, sus parques, sus tianguis, padecen el abandono de su autoridad. Un millón de baches, el 50% de las luminarias inservibles, sus mercados en peligro de derrumbe, el 70% de sus parques presas de la delincuencia y el apoderamiento de particulares que cobran el uso de las instalaciones para su particular peculio, así como la delincuencia y la corrupción en el cobro a los tianguistas, son evidencia de un mal gobierno. Mérida tiene un alcalde que en campaña prometió que todo eso se arreglaría, y al final, todo empeoró. La basura se pudrió. No pudo y eso aquí y en China, se llama ineptitud.

Ambos, Raúl y Mauricio no quisieron meterse en problemas y le prodigaron a Renán Barrera puros elogios al emitir sus mensajes. Sin embargo, el efecto que causaron en la militancia es repudio. Pesó más en ellos el veto de Renán que la admiración de la militancia.

Uno de ellos dijo que los “otros” le apuestan al olvido, y en realidad, en el PAN le apuestan también a eso, porque hoy la militancia volverá a elegir teniendo a una Ciudad que se cae a pedazos, como resultado de haber apoyado a un panista corrupto y sin corazón.

Mérida es el botín de los panistas. De allí se sostienen más de mil funcionarios. Seguro veremos a los de ayer, ponerse en la fila para volver a pegarse a la ubre presupuestal. De allí que no exista renovación alguna. Son los mismos dinosaurios azules los que abanican a los “chavos” del mañana.

Viene una “madrina” durísima entre los ejércitos de las almas buenas. Mientras que los grupos de “militantes distinguidos” se pelearán el poder municipal donde el dinero de los meridanos servirá para enriquecer las bolsas de los panistas de abolengo de siempre. Y también a algunos empresarios que desde la “ciudadanía” financian campañas para luego recibir obras públicas y acrecentar su riqueza. Todo a costa del pueblo. Con esto no creo que Gómez Morín esté contento desde el más allá, como aseguran.

Se avivan los tiempos de guerra, de masacre interna, donde las ofensas avivan los odios, las venganzas y el rencor.

Nada lo evitará, ni siquiera las encuestas del ex Diario. Nada.

¿Qué quién es el mejor de los dos?, eso solo la militancia lo decidirá, según lo que les diga la emoción. Aunque creo que el factor Renán Barrera jugará un rol importante. En el PAN también se compran votos.

El PAN sufrirá de nuevo un gran desgaste, producto de todo aquello que no han querido sanar. La unidad en el PAN se extinguió con la muerte de Don Víctor Cervera Pacheco, el único político que en vida los unía.